thumbnail of Línea Abierta; 4233; Juárez Case: The Crime Of The Century
Transcript
Hide -
This transcript was received from a third party and/or generated by a computer. Its accuracy has not been verified. If this transcript has significant errors that should be corrected, let us know, so we can add it to FIX IT+.
Bienvenidos a línea abierta, su programa de Discusión y Comentario ofrecido por Radio Bilingüe desde Fresno, California, con auspicio parcial de la Corporación para la Difusión Pública. línea abierta, presenta, caso Juárez, el crimen del siglo, una investigación del periodista Ken Patterson y producciones puntos de vista fronterizos 2000 de albuquerque nuevo México. Este programa documental reporta a fondos sobre los cientos de asesinatos y desapariciones de mujeres en Ciudad Juárez, México. Es el amanecer de un nuevo siglo en Ciudad Juárez, México, y en el centro de la ciudad, entre zapaterías, escuelas de computación y centros nocturnos, un grupo de danzantes aztecas eleva una plegaria por el descanso eterno de almas de cientos de mujeres asesinadas. Guillermina González nos cuenta su tragedia.
Exactamente mi hermana fue asesinada en el 98, una joven de 17 años, la cual no puede aceptar su muerte de tal manera que se dio lo cual, por eso exijo justicia. Mi hermana tanto como fue ella, pude haber sido yo, pudo haber sido cualquiera lo que estamos aquí. Según los informes publicados por Amnistía Internacional y la Prensa, desde el año de 1993, a los primeros meses del año 2004 fueron asesinadas más de 400 mujeres en Ciudad Juárez y el Estado de Chihuahua. Los resultados que rojan las estadísticas, afirman que la mayoría de estos descesos están vinculados con la violencia entre familiar, el robo, e incluso muchos el narcotráfico. Sin embargo, se pudo comprobar que dentro de este alarmante número de víctimas, por lo menos 100 fueron atacadas sexualmente con un patrón de características similares, a la vez que la lista de jovencitas que desaparecían aumentaba.
Pero fue hasta 1993 durante la administración del excobernador panista Francisco Barrio cuando salió a la luz pública esta serie de crímenes. Sin embargo, para mucha gente, esta historia de sangre e indignación comenzó desde tiempo atrás. Pero nosotros tenemos documentación de que desde los años ochentas se incrementó esta situación de las mujeres. Escuchamos la voz de Judith Galarza, quien es directora de la Federación Latinoamericana de Asociaciones de familiares de detenidos desaparecidos, con Sedén Venezuela. Ella vivió un tiempo en Ciudad Juárez y tiene una larga trayectoria en la lucha por los derechos humanos y de la mujer. Nosotros tenemos varios casos que lamentablemente nunca quisieron denunciar las jóvenes que fueron violadas sexualmente, de las nuevas características que hoy, pero ellas fueron detenidas algunas de ellas que nunca quisieron presentarla denunciante la policía judicial,
porque las características era de que los violadores hablaban en claves, en claves como las que tiene la policía. Las primeras víctimas de estos brutales asesinatos permanecen en el anonimato. Sus cuerpos eran encontrados entre basura y escombros en la periferia de la ciudad. Las autoridades especulaban acerca de la doble vida de las víctimas, restando importancia a estos crímenes por según ellos, tratarse de prostitutas. Y con esta actitud pasaban por alto el dolor de la gente y la indignación del pueblo. También se dieron a la tarea de ocultar información sobre el número y el estado de los cuerpos que encontraban. Mientras tanto, ciudad Juárez vivía terrorizada por la creencia popular de que un asesino en serie de la talla de Jack el destripador andaba suelto por las calles en busca de nuevas víctimas. Sergio González Rodríguez, autor de huesos en el desierto, un libro basado en una profunda
investigación sobre el caso de las asesinadas de Juárez nos comenta. Había testigos que escucharon como llegaba a una camioneta a la zona y arrojaban este cuerpo y como al menos se hablaba de dos individuos desde entonces. Esto fue completamente desconcertante porque estábamos hablando que ya no era solamente la idea de una asesina en serie, desde 1995-1996 se sabía, sino que al menos eran dos individuos que participaban en complicidad en arrojar uno de los cuerpos allí. Amor, es hacerse llevar por el viento y la brisa del mar, es ser como el cristal frágil y pequeña, a la vez como el acero, duro y fuerte. Había que conociera a Olga Alicia Carrillo Pérez podría describirla como una joven con la ilusión de abrirse paso en la vida. Además de trabajar en las zapaterías 3 hermanos
de Ciudad Juárez, también se daba el tiempo de escribir poesía, mientras juntaba el dinero para cumplir su anelo de estudiar en la Universidad del Tecnológico de Monterrey de Ciudad Juárez. Pero su vida y sus sueños fueron truncados en 1995 cuando fue terrible mente violada y asesinada. Olga Alicia compartía características físicas y sociales con otras víctimas, de piel morena, delgadas, bonitas, con edades entre 15 y los 20 años en su mayoría, de un trato social humilde y algunas de ellas inmigrantes centroamericanas. Ninguna era de la clase rica de la ciudad, de manera sospechosa algunas víctimas trabajaban en la misma maquiladora o tenían algún contacto con la cadena de zapaterías 3 hermanos de León Guanajuato. Las autoridades siguieron otra línea muy diferente de investigación. Este es un fragmento extraído de una entrevista que su liponce, ex fiscal especial encargada
de las investigaciones, dio en el año de 2001 y explica a detalle cómo las autoridades estatales detuvieron en 1995 a Abdel Latif Sharif. Sharif es un ingeniero de origen egipcio quien según ponse, planeó y cometió varios asesinatos. La ex fiscal asegura que, a un preso, Sharif en complicidad con victor Moreno Rivera contrataron a varios hombres para que violaran y mataran mujeres con la finalidad de demostrar que el sospechoso era inocente. En todo momento siguió gritando y diciendo que iba a seguir abriendo muertes de mujeres porque no eran ellos los culpables y que solo lo iba a demostrar. Existe una controversia muy grande alrededor del caso Sharif, pues además de que las autoridades de Chihuahua nunca encontraron de dónde extraía el dinero para pagar a sus supuestos colaboradores, estos aseguraron que fueron torturados y obligados a confesar. El yodoro Juárez,
expresidente de la Comisión estatal de los Derechos Humanos en Chihuahua, expuso en 1998 algunas de las contradicciones en el caso Sharif. Tiene a una mujer defendiéndolo y ella no es abogada. El ya no tiene ni un cinco, en realidad no tiene ni un cinco, tenía 13 mil dólares, tengo entendido. Los primeros abogados le cobraron 10 mil dólares con nosotros, 3 mil dólares, él se fue manteniendo cuando se le acabó el dinero, los abogados dijeron, ya no te defendemos. Entonces, Sharif tuvo que tomar el defensor y oficio, pero los defensores de oficio en realidad no hacen nada en favor de una persona procesada. Durante su gestión, el yodoro Juárez recibió una denuncia sobre los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez y la hizo extensiva a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, resaltando que a la fecha se habían detectado múltiples irregularidades en las investigaciones estatales realizadas. Para el año de 1998, la Comisión Nacional de Derechos Humanos hizo algunas recomendaciones al gobierno panista de Francisco Barrio. Escucharemos la voz
de el yodoro Juárez. Por eso, la Comisión Nacional envió recomendaciones fuertes al gobierno del Estado y al gobierno municipal de Juárez, pero el gobierno del Estado no aceptó el total de las recomendaciones. He aceptado que ellas que les dicen que investigue de manera más eficiente y más profesional, pero no aceptó establecer alguna responsabilidad para sus funcionarios. Dice mis funcionarios, están perfectamente bien, pero las evidencias, la ineficacia no dice que están absolutamente mal, se encontraron graves deficiencias en los procedimientos, gravísimas deficiencias y la Comisión Nacional se auxilió de médicos, de criminalistas, incluso de criminólogos. A pesar de las recomendaciones hechas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos al gobierno de Chihuahua, las autoridades se empeñaron en entorpecer todas las líneas de investigación, llegando incluso a incendiar evidencia y perder muchos de los expedientes
que contenían información clave que hubiera sido de gran utilidad para resolver esta ola de homicidios. Con el paso del tiempo, el caso Sharif seguía causando controversia. Por su parte, Diana Washington Valdez, periodista en el paso Tejas, interesada en los asesinatos de Juárez, se dio a la tarea de indagar el historial de Alejandro Maynes, un operador de bares y posible pariente del exgobernador prista del estado de Chihuahua, Oscar Sotomaynez. Sharif señaló como culpable de muchos de los asesinatos cometidos hasta entonces a Alejandro Maynes. Las autoridades lograron detener brevemente a Alejandro Maynes en 1991 como el responsable de la muerte de una joven bailarina que respondía al nombre de Silvia. Esta persona, Armando Martínez o Alejandro Maynes como le quieren decir, él mismo comentó
dos agentes, dos policías que él estaba involucrado en los crímenes y también este dijo que a él nunca se le podía hacer nada porque su papá era un hombre muy importante, aunque nunca supimos quién es el papá porque ni la familia de él ni otras personas que llegamos a entrevistarnos que hicieron decir quién era su papá biológico. Interesantemente, él fue reportado como asesinado hace unos años, pero un año después de esos rumores aparece en el entierro de un exgobernador de Chihuahua cuyo apellido es Maynes. Interesantemente también nos dijeron que se casó con una mujer que ciudadana norteamericana y que tal vez está viviendo en el paso ahora bajo otro nombre todavía diferente. Según Washington Valdez, Alejandro Maynes podría ser uno de los múltiples culpables de violación y asesinato. Las mataron en una manera sistemática, que son
seleccionadas y las matan, pero esto no quiere decir que los otros crímenes son menos importante. Yo hago esa distinción para señalar lo que podía hacer el trabajo de asesinos en serie, porque también existen otras situaciones aparte de los hombres prominentes, tenemos por lo menos dos asesinos en serio que andan sueltos todavía. Para el año de 1999, Patricio Martínez, el nuevo gobernador prevista del estado de Chihuahua declaraba que el caso de las asesinadas de Juárez podría considerarse como una pesadilla del pasado. A finales de noviembre de ese mismo año, un escándalo de proporciones internacionales se desató en Ciudad Juárez cuando agentes del FBI en colaboración con agentes de la Procuraduría General de la República Mexicana desenterraron de las llamadas narcofosas los cuerpos de nueve hombres ejecutados. Casualmente, estas narcofosas estaban ubicadas en el mismo perímetro donde habían aparecido
los cuerpos de por lo menos una decena de mujeres víctimas de violaciones asesinato. El periodista Sergio González Rodríguez continuó con su trabajo sobre los asesinatos a pesar de haber sido víctima de una brutal golpiza y amenazas de muerte que tenían la finalidad de persuadirlo de abandonar sus investigaciones. González Rodríguez decidió hacer caso o miso de estas amenazas y entrevistó a Francisco Minjárez, comandante de la policía judicial del estado de Chihuahua y encargado de una parte de las investigaciones sobre los homicidios. Poco tiempo después, Sergio González sufriría un nuevo atentado. En ese momento, me ha sido una amenaza exprista. Me dicen que ellos han llegado han sido enviados para alertarme de que abandone o de que tenga mucho cuidado con lo que estoy haciendo porque estoy metido en un asunto muy serio en el que no me debo meter.
El 11 de septiembre del año 2003, casi cuatro años después, Francisco Minjárez, excomandante de la policía judicial del estado de Chihuahua, fue asesinado. En el año 2000, Lourdes Diaque, periodista dedicada a estudiar el caso Juárez, fue violada y asesinada en la ciudad de México. Al respecto, Sergio González comenta. Yo traté de indagar cuál pudiera ser la razón por la que más allá de unas altos suceden estas cosas. La gente que trabajaba con ella me hace la explicación muy sencilla de que era una mujer que si había tenido una participación muy complicita sobre el asunto de reivindicar a las víctimas de los homicidios sencidas Juárez y que había tratado el tema en una sin o varias veces. Una tras otra inevitablemente las fotos de las mujeres desaparecidas en Ciudad Juárez se hicieron presentes en la ciudad. De bajo de cada uno de los rostros, en grandes letras podían leerse los nombres de cada una de ellas.
Veronica Martínez, Elizabeth Núñez y Guadalupe Luna de La Rosa eran sólo unas cuantas de la fatídica lista. Mi hija desapareció el sábado 30 a las 12 de Mediodía y va ella salió de la casa a las 12 porque tenía la cita con su amiga la una de la carne. Escuchamos el testimonio de Celia de La Rosa, madre de Guadalupe Luna de La Rosa, Lupita, quien era estudiante de la carrera de administración de empresas en el tecnológico de Monterrey y que tristemente ingresó a la lista de desaparecidas en septiembre del año 2000. Cuando tenía tan sólo 19 años, Celia nos relata su dolorosa historia. Si salían temprano, yo iba y la dejaba hasta la parada de la ruta y se iba. Si llegaba noche, yo iba y la esperaba en la parada de la ruta y yo. Así, pero era pleno mediodía. A pleno mediodía en sábado, yo no me imaginé que me iba a pasar. La Procuraduría del Estado de Chihuahua declaró en noviembre del año 2001
que el cuerpo de una de las víctimas de estos brutales asesinatos encontrado en un campo de algodón en Ciudad Juárez pertenecía a Guadalupe Luna de La Rosa. Sin embargo, el resultado que rojo la prueba de ADN descartaba cualquier relación entre el cuerpo encontrado y el ADN de los familiares de Guadalupe Luna de La Rosa. Poco a poco, la serie de protestas en contra de la violencia hacia las mujeres tomaron fuerza tanto en México como en el extranjero. En Albuquerque, nuevo México, integrantes de la red para la justicia ambiental y económica, una agrupación de más de sesenta organizaciones no gubernamentales de México y los Estados Unidos se manifestaron ante el consulado mexicano. ¡No no vamos a mo정! ¡Var enorme, pobre! Escucharemos el testimonio de Mikael Azoliz, quién viajo desde Ciudad Juárez.
Se dice que Ciudad Juárez es un laboratorio de la modernidad, de la globalización, del modernismo Esta ciudad está creciendo monstruosamente, sin ninguna previa, esta organización urbana, se está llenando de gente humilde, a que no tiene que comer en los poblados del resto de México. Con muchos con la esperanza de venirse a trabajar Estados Unidos, lo cual es un riesgo muy grande, porque acá también mueren. Pero muchas hijas de esas familias que se van buscando, ¿qué comer están siendo asesinadas? Y no hay quien lo pared, es un monstruo que tiene mil cadezas y ni un al mismo tiempo. ¡Holo, muy buenas! ¡Hasta el fondo, Iguales! ¡Qué lo que queremos! ¡Hasta el fondo, Iguales! Como fiscal, Sully Ponce expresó públicamente que estaba convencida de que poniendo en práctica los métodos que habían aprendido tanto del FBI como de la policía del paso Tejas, aunado al hecho de que Abdad, Latif Sharif
y sus supuestos complices estaban tras las rejas, los angrientos y brutales crímenes por fin habían terminado. Y yo creo que en muy poco tiempo yo puedo darme el gusto de poder decir abiertamente que en Ciudad Juárez ya no hay ni un solo crimen sexual. Pero a los pocos días de que Sully Ponce pronunciara tan alentador discurso, fue encontrado el cuerpo de Lilial Alejandra García, quien trabajaba en una maquiladora hieran madre soltera de dos pequeños niños. La joven madre había sido cruelmente torturada y violada, yo la tuve mis entrañas, yo la críe, yo la vi crecer para que para que cuando me la entregaran y la entregaran en un cajón. La madre de Lilial Alejandra, la señora Norma Andrade, nos cuenta que las fotos del cuerpo de su hija mostraban claramente la presencia en las muñecas de marcas de doble surco, un indicio que no dejaban ninguna duda de que Lilial Alejandra había sido esposada.
La señora Andrade agrega que el FBI tuvo la fortuna de encontrarse con una pista que lo llevaría a dos hallazgos sumamente importantes. En primer lugar, lograron determinar el sitio exacto donde Lilial fue secuestrada y en segundo lugar los nombres de los posibles responsables. De acuerdo de la información del FBI dicen que eran narcotráficas, que ellos son narcotráficantes. Pero todo esto salió, las fechas coinciden con las fechas de desaparición de mi hija, la información también, el Tele-Servicio de Minges estén en un centro comercial que se llama San Valentín, que está dos cuadras de donde ella desaparece. Pero todo eso se lo publicaba en el periódico antes de que la policía investigara algo. Entonces, a los dos meses de que sale publicado me invitan a mi a ir a catear el lugar. Ya para qué? Si usted va ahorita, usted se va a encontrar que el Tele-Servicio de Minges es una casa de dos pisos y en el tercer piso
tenían un cuarto que ya no existe. Un hecho digno de tomarse en cuenta en el caso de lo misidio de Lilial Ejandra es que a los ocho días del crimen, la señora Andrade recibió la llamada de la escuela de computación eco, donde días antes y con el propósito de aprender una carrera técnica que le permitiera salir adelante con sus pequeños hijos, Lilial Ejandra había ido a pedir informes para poder trabajar. Pero como recibió una beca, dice, es que ella vino y pidió informes y hizo su licitud, dice, y estamos hablando para decirle que se ganó una beca. Entonces, yo le dije al promotor. Mi hija falleció. Entonces, joven, si hay señora usted jugando, tú crees que yo jugaría con una cosa así? Entonces, ya el joven ya no me dijo nada. Y como muchos otros, el crimen del Lilial Ejandra García quedó en la impunidad. Para noviembre del año 2001, Ciudad Juárez encaraba uno de los peores momentos en la historia de los asesinatos.
Los cuerpos multilados de ocho jovencitas víctimas de la tortura y la violación fueron encontrados en uno de los pocos predios de algodón que todavía existen dentro de esta ciudad fronteriza. Este predio está ubicado frente a la sede de la asociación de maquiladoras. Por su parte, un diario local publicaba una nota en donde se daba a conocer que algunos vecinos habían identificado. Diaz antes, la presencia de la policía en la zona donde fueron halladas las víctimas. Yo les he pedido que me muestre en el cuerpo al principio. Les pedía que me mostraron el cuerpo cuando recién las trajeron. Y no me lo quisieron mostrar. Nunca me lo han querido mostrarles. He pedido que me muestre en fotografías de levantamiento y tampoco se niega que las fotografías les tienen en Chihuahua, que porque el caso ya se cerró y todo eso se fue hasta Chihuahua. Estas fueron las palabras de la madre de Laura Verenice Ramos, una de las víctimas de este trágico episodio.
Ella tan solo contaba con 17 años de edad. Venita Monarres nos cuenta con tristeza que su hija tenía la ilusión de llegar a ser médicoforence. Ahora se lleron, se llama muy alegre, muy cariñosa con todo el mundo. Ella no tenía novio porque ya decía que el novio le quitaba tiempo para sus estudios. ¿Por qué no está aquí la esposa del presidente municipal? ¿Por qué no está aquí la esposa del procurador de justicia? A los pocos días de este terrible ayazgo, la policía judicial del Estado de Chihuahua arrestó a Gustavo González, alias la foca y a Víctor García alias el serillo, como presuntos responsables de estos asesinatos. Los procedimientos que siguieron las autoridades para culpar a estos sujetos tenían una serie de irregularidades. Escucharemos el testimonio de Blanca López, Víuda de Gustavo González.
Entonces, eligieron que si no salían y van a sacar en sus armas, estaba yo para ese tiempo embarazada. Y sacaron sus armas apuntándole a todos nosotros que estaba a mi suegro, estaba él, primos, y yo, está nos allá fuera. Fueron a las dos y medio de la mañana sacarlo. Tanto Gustavo González, como Víctor García, confessaron que fueron torturados por elementos de la policía judicial del Estado de Chihuahua y obligados a declararse culpables por los crímenes que se les imputaban. La procuraduría estatal de justicia negó a haber cometido tales atropeños. Misteriosamente, en febrero del año 2003, Gustavo González falleció después de haber sido sometido a una cirugía en el interior de la penitenciaria del Estado de Chihuahua. Un año antes, Mario Escobedo, quien fuera abogado defensor de Gustavo González, sufrió una serie de amenazas que concluyeron con su asesinato y que fue perpetrado por miembros de la policía judicial del Estado de Chihuahua.
Por otra parte, Víctor García continuaba preso a pesar de que el plazo máximo para enjuiciarlo y dictarles sentencia había concluido. ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! ¡Ni un tan más! No es posible que en los fotos como ciudadanos miembros de esta ciudad, habitantes de esta ciudad, estemos permitiendo que las autoridades no resuelvan los casos. Con el transcurso de los años, alrededor del caso de los crímenes de Juárez, se han tejido historias sensacionalistas, fomentadas y promovidas por algunas autoridades y algunos medios de comunicación. Estos han servido para entorpecer pistas y crear en la opinión pública una imagen distorsionada de la realidad. Pues se han dedicado a la tarea de difundir teorías, tales como los asesinatos que fueron cometidos por traficantes de órganos, o por miembros pertenecientes a cultos atánicos,
o por productores de películas NAF, o por soldados del Fort Bliss. Sergio González Rodríguez comenta. A la fecha, los crímenes siguen sucediendo. Está claramente evidenciada la participación de policías en complicidad con delincuentes en este tipo de homicidriosa. Está registrada una red de protección hacia los homicidas, por parte de policías y funcionarios, que llegan desde el nivel municipal, desde el nivel estatal y que incluye funcional federales. Está también claramente registrada la participación del crímeno organizado en estos homicidios, es decir, fundamentalmente el narcotráfico. Y a la fecha insisto, los homicidios siguen sucediendo. Si recordamos que el crímeno organizado en Ciudad Juárez funciona como una entidad de fuerte poder y capital que es capaz de tener influencia en todos los niveles del poder en México
y que además tiene una participación política dura. Nosotros estamos encontrando el verdadero fondo de Ciudad Juárez. Usted ha escuchado la primera parte del caso Juárez, el crímen del siglo. Esta es una producción de puntos de vista fronterizos, 2000, la cual es única responsable del contenido de este programa. No deje ustedes sintonizarnos para escuchar la segunda parte de este reportaje en donde analizaremos cómo se han extendido los asesinatos en contra de mujeres a otras partes de la República Mexicana y su posible vinculación con los casos de Juárez. Gracias por su atención. Yo soy Guillermina Kiros. Está usted escuchando caso Juárez, el crímen del siglo,
una producción de puntos de vista fronterizos, 2000 y el periodista Ken Patterson. El movimiento en la central camionera de Chihuahua no se detiene. Nunca cambia a lo largo del día y de la noche. Tampoco las fotos de las mujeres desaparecidas cambian. Pues se mantienen en su lugar e incluso algunas sonríen inocentes desde el gastado papel donde fueron impresos sus ojos, su cabello y la totalidad de sus sueños truncados para siempre. Los pasajeros que esperan la salida de su autobús pueden leer las señas particulares y los nombres de las víctimas.
Y entre ellas se encuentra el nombre de Minerva Torres. Escuchamos a Martina Albeldano, la madre de Minerva Torres, quien tenía 18 años cuando desapareció en el año 2001. No, pues, es un muy triste olla. Hasta se pone uno pierde cuando sale uno de aquí porque empieza a uno a buscar y no encuentra uno nada. A mí se me viene mucha depresión de saber que no hay ninguna razón, ninguna pista y hay tanta búsqueda. Doña Martina asegura que su hija siempre se había comportado como una persona tranquila, solitaria y religiosa, y que el día de su desaparición iba a una entrevista de trabajo en una agencia de empleo para muchachas, la cual se ubicaba en un inmueble rentado a nombre de una tal mariantonieta rodríguez de Alba. Coincidentemente, Minerva Torres había estudiado en el plantel de Eko ubicado en la ciudad de Chihuahua.
En el año de 2002, desapareció otro estudiante de las escuelas de computación Eko del Plantel de Chihuahua, una joven de apenas 16 años. Paloma Angelica Escobar fue violada y desnucada y su cuerpo arrojado muy cerca de la entonces nueva sede estatal de la policía judicial de Chihuahua. Escuchamos a Jimena Andión. Lo que nos preocupa más en este caso es que también ocurrieron una serie no solo de omisiones sino de acciones de encubrimiento y de fabricación de pruebas por parte de autoridades de la procuraduría, incluso para culpar a una persona de las escinatos de esta chica. Después se descubrió que la comandanta cobo había fabricado pruebas y esta comandanta fue retirada del cargo, la persona que había sido acusada que el exnova de Paloma salió de prisión. Un promotor de Eko, llamado Francisco Ramírez, fue supuestamente la última persona que vio a Paloma Angelica
antes de su desaparición. Sin embargo, poco tiempo después, también Francisco Ramírez desaparecía sin dejar huella. Por su parte, la procuraduría estatal de Chihuahua había recibido durante la primavera del año 2001 denuncias de padres de familia que implicaban a una escuela de computación en irregularidades con los alumnos. Es decir, mucho tiempo antes de la desaparición y asesinato de Paloma Angelica y las desapariciones continuaron irremediablemente. Precisamente, un año después del asesinato de Paloma Angelica y en el marco de una dolorosa protesta por la falta de justicia y eficacia de las autoridades para resolver la serie de homicidios en contra de mujeres en la frontera mexicana. Miembros de la sociedad civil pusieron clavos con los nombres de algunas de las mujeres asesinadas en una cruza al pie del puente de Santa Fe en Ciudad Juárez.
A continuación, el testimonio de Norma Ledesma, madre de Paloma Angelica Escobar. Muchas gracias por estar con nosotros, porque está cruz. Y ustedes ven aquí. No tiene el peso suficiente para simbolizar la cruz que tenemos en nuestras vidas. Al haber perdido a nuestras hijas. Mija Paloma Escobar, igual que cientos de las mujeres de Ciudad Juárez, salió un día romba a su escuela llamada ECO y ya no regresó. Igual que en Ciudad Juárez desaparecen de la misma manera. Se encuentran después asesinadas y algunas jamás se vuelven a encontrar. En marzo del año 2003, desapareció en Ciudad Chihuahua
una adolescente llamada Viviana Rallas. Dos meses después, la policía judicial presentó a dos sospechosos del secuestro y el homicidio de Viviana. El mexicano Ulisses Persaval y su esposa norteamericana Sintia Kieker. Sintia Kieker tuvo mucho tiempo en la penitenciaria de la Ciudad de Chihuahua para compartirlo con otra presionera más celebre, la roquera Gloria Trevi, y para hablar acerca de su detención. Sintia Kieker sostiene que los judiciales ejercieron tortura física y psicológica en contra de ella y su marido. Tortura que iba desde las descargas eléctricas aplicadas en el cuerpo hasta las amenazas de muerte. Y es decir, que eran los que realmente se me han estado y que se pueden matar. Por otra parte, el arresto de Sintia Kieker se convirtió en una controversia
entre el gobierno de los Estados Unidos y las autoridades mexicanas. Insistió Washington que la detención de Sintia Kieker no era fundada y representaba un error en la investigación del crimen de Viviana Rayas. La licenciada Science de delitos sexuales verá ella a mi casa, para que yo fuera a ver identificar una ropa de ese cuerpo que ven encontrado. Entonces iba, pues, mi señor y mi sobrino veía una prima mía. Semanas posteriores al arresto de Ulises Persaval y su esposa Sintia Kieker, la procuraduría del estado de Chihuahua se comunicaba via telefónica con Patricia Cervantes, madre de Neyra Azucena, una joven estudiante que ya había sido reportada como desaparecida. Casualmente, Neyra Azucena tomaba cursos de computación en la escuela era conocida anteriormente como escuela de computación eco. Ella, todas las personas que se acercan o ella si le piden ayuda, ella les ayuda.
Y yo sea que, por eso, cuando apareció ese cuerpo, antes de que apareciera ese cuerpo, me decían muchas personas que me conoce. Me decían, no te preocupes, Pati. A Neyra no la pueden matar. Dice, porque ella es demasiado buena. Y bonita, ¿verdad? Y todas esas cosas, pero estamos enfrentándonos a criminales más bien eso de lo que estamos viendo. Pero la pesadilla de la familia de Neyra Azucena aún no terminaba, porque después de haber recibido la llamada de la Procuraduría y su representante, la Licenciada Science, Patricia Cervantes afirma que personal de la Policía Judicial del Estado detuvieron a su marido y a un sobrino llamado David Mesa. Y en exámenes médicos posteriores a su detención, se confirmó la existencia de graves lesiones provocadas presuntamente por tortura por choques eléctricos en el cuerpo de mesa.
Pero una vuelta del destino llevaría a encontrar una pista de los asesinatos de mujeres en el estado de Chihuahua, no precisamente en las cercanías, sino a cientos de kilómetros de ahí, en las playas de México, en el pueblo de Xtapas y Huatanejo, que se vio conmocionado por un escándalo en el año de 2001. A estas chicas las llevaron a un velero, a un jate, y un americano, dicen que se fue americano, porque ellas, mismas lo dicen, les empezó a bailarlo, se empezaban a desvestir delante de ellas, y ellos dijeron que deberían detraer para la próxima vez, deberían detraer más amigas. Gabriela Terrasas es una activista pro-mujer y también funcionaría municipal. Ella nos explica cómo un grupo de jóvenes mujeres fue a pedir ayuda en ese año del 2001, después de que huyeron de una casa donde permanecieron prácticamente secuestradas. Ellas fueron contratadas por dos sujetos,
llamados Rubén Ponce y Héctor Manuel González, para trabajar como promotoras de una escuela de computación, que supuestamente mantenían nexos con la cadena nacional grupo premier, cuya sede se localiza en San Luis Potosí. Gabriela Terrasas explica cuál era la expectativa de las jóvenes cuando llegaron a buscar trabajo al paraíso tropical que representaba Xtapas y Guatanejo para ellas. Hay un lugar entre Colima y Guadalajara, donde estaban las maquiladoras. Al cerrar las maquiladoras, esta gente se aprovechó de la necesidad de las jóvenes que estaban ahí trabajando. Y se las trajeron con engaños, diciendo que les iban a dar muy sueldo a la semana de que iban a tener casa, comida y todo. Cuando estas chicas llegan aquí a Xtapas, en primera les quitaron toda su documentación, tanto el acta de nacimiento, como la cur, como todos los papeles de estudios que ya tenían, se los pidieron todos los originales,
porque no fueron copias, fueron originales. Entonces estas chicas se vienen para acá, llegan en la madrugada y las meten en una casa donde no había camas, donde no había comida, donde no había nada. Y estaban custodeadas por una persona que es el señor Ponce. Y al día siguiente, las levantaron muy temprano y les dijeron que se tenían que ir a trabajar. Sin embargo, Rubén Ponce y Héctor Manuel González fueron demandados por un grupo formado en su mayoría por jóvenes mujeres, quienes alegaban sus puestas violaciones a la ley federal del trabajo en sus contratos y en el desempeño de su trabajo. Como era de esperar, los inculpados negaron los cargos y al final se llegó a un acuerdo en donde se regresaría a las jovencitas a su lugar de origen. Pero el caso fue seguido por la Policía Judicial del Estado de Guerrero y su comandante regional de ese entonces Thomas Herrera. Al final, la investigación fue cerrada. ¿Tuvieron lugar a una serie de asesinatos de mujeres
en Sigua Tanejo entre los años 2002 y 2003 que sumaron por lo menos 7? Algunos de ellos con características muy semejantes a los perpetrados en Ciudad Juárez. Poco antes de los asesinatos ocurridos en Sigua Tanejo, tuvieron lugar unos acontecimientos de lo más comunes en cualquier ciudad, pues una serie de negocios abrieron sus puertas y ofrecieron sus servicios a la población. Pero lo que salta a la vista son los nombres de estos negocios. Zapaterías tres hermanos y Safari Club entre otros. Todos ellos son nombres, que de un modo u otro han aparecido en conexión con los crímenes en Ciudad Juárez. Aunque no ha podido establecerse una conexión directa entre las desapariciones y los asesinatos de mujeres con estos negocios, resulta escalofriante la cantidad de veces que son mencionados en las actas como los lugares
donde solían trabajar o visitar las víctimas. Y por si fuera poco, el nombre de la cadena nacional grupo premier tendría una mención más, pero muy lejos de ahí. En la mañana del día ocho de enero del año 2003, en una de las intersecciones más transitadas de la ciudad de Nuevo Laredo Tamaulypas, formada por las calles Aldama y Venezuela, fue encontrada el cadáver de Olga Lidia Osorio, quien presentaba señales de haber sido brutalmente golpeada y violada. Olga Lidia estudiaba computación en una escuela perteneciente al grupo premier. Uno de los primeros en llegar a la escena del crímen fue el reportero Vicente Ranjel. Mi primera reacción fue de colaje porque, en principio, cuentas una joven, pues no me dice, no me dice a morir de esta forma.
Te quedas asustado de valla, de sadismo con el que personas cometen estos delictos, estos hechos tan macabros, tan horrible. Las botas, pardon, son botas de última moda que tenemos en la parcería del progiero. El camino que Olga Lidia recorría todos los días para llegar a la escuela de computación, necesariamente la llevaba a atravesar el centro de la ciudad de Nuevo Laredo, que, al igual que ciudad Juárez y Chihuahua, es un centro pletórico de zapaterías, escuelas de computación, centros nocturnos y, por supuesto, el tráfico de drogas. Y, aunque el brutal homicidio de Olga Lidia Osorio estremeció a la comunidad de Nuevo Laredo, los datos que reunió y dio a conocer el grupo Seth Prodac, una organización no gubernamental con Seth en reinoza tamalipas, demostraban que entre el año de 1999 y los primeros meses
del año 2004, habían ocurrido por lo menos 136 asesinatos contra mujeres a todo lo largo de la frontera tamalipeka. La historia de Olga Lidia Osorio es muy parecida a la de muchas otras jóvenes, pues su familia se había trasladado apenas dos años atrás, desde el lejano estado de Morelos con la esperanza de encontrar una vida mejor en Nuevo Laredo. Pero también, al igual que las cientos de víctimas en Ciudad Juárez y Chihuahua, Olga Lidia fue una joven muy bonita, de clase humilde y con muchas ilusiones de salida delante. El canto de las aves, su ave y lleno de melancolía, se escuchaba desde afuera de la casa del señor Pedro Osorio, padre de Olga Lidia Osorio, mientras nos platicaba cómo había sido el camino que había recorrido mientras buscaba justicia para su amada hija. Un dolor, muy grande, del dolor, sentimiento, esa esperación, coraje a la vez con quienes haya sido.
Y pues nosotros, al consuelo, que sí tenemos y tenemos también la fe que tarde o temprano las autoridades van a dar con los malachores. También le hemos perdido mucho a Dios, que los ayude a ellos mismos, que los ayude a ellos mismos a poder descubrir realmente los malachores que sean, que la deban. Tampoco no queremos que la vayan a apagar a las personas que no la deban. El abogado que la familia contrató para que llevar a el caso de Olga Lidia, renunció a continuar a medrentado por las constantes amenazas de que era objeto. Por otra parte, Felipe Ramírez, quien fuera primer comandante de la policía ministerial, una dependencia supuestamente encargada de investigar el asesinato de Olga Lidia, era suspendido por ser sujeto de investigación sobre un posible caso de encubrimiento de una banda de secuestradores
que operaban en la ciudad de Monterrey Nuevo León. Mientras tanto, Natanael Parra, un maestro del grupo premier, fue acusado de violar a una de sus estudiantes, aunque posteriormente salió libre bajo fianza. Inexorablemente, el tiempo transcurría y el homicidio de Olga Lidia quedó impune, como el de otras muchas mujeres cruelmente violadas y asesinadas. En agosto del 2003, un grupo de periodistas mexicanos y extranjeros llevaron a cabo la operación sagrario en pleno centro de Ciudad Juárez. El objetivo de la operación era básicamente hacer una redada en los negocios que supuestamente tenían relación directa con los asesinatos. Estos negocios estaban ubicados en el mismo perímetro donde habían desaparecido dos escenas de mujeres. Según una información que se había filtrado de las investigaciones hechas por el Federal Bureau de Investigación, el FBI, la Escuela de Computación ECO
fue responsable de seleccionar a las mujeres y canalizarlas a través de distintos negocios donde una a una fueron encontrando la muerte. El bar malvoro es uno de estos negocios que se cresta estrechamente ligados a los asesinatos. A continuación escucharemos la llamada telefónica que la periodista norteamericana, Diana Washington Valdez, sostuvo con el presunto dueño del bar malvoro llamado el huero. En una información que el FBI pasó a la policía estatal de Chihuahua diciendo que aquí uno, el huero del mar prove que es el dueño de este club, tiene que ver con el asesinato de las mujeres de Juárez. Usted. Entonces, ¿por qué cree que estás señalado? No tiene ninguna idea. A pocos metros del bar malvoro se podía encontrar el establecimiento de uno de los sitios más famosos de Ciudad Juárez,
la Sevillana, que fuera alguna vez uno de los restaurantes más visitados por la élite de un tiempo ya olvidado. Hasta hace poco tiempo, aún podía verse en una de las paredes la fotografía firmada por Juan Gabriel. Aquí es el lugar donde el FBI asegura que mujeres que han desaparecido fueron secuestradas. En la conversación que Diana Washington sostiene con el supuesto dueño de la Sevillana, Francisco López, ella lo interroga sobre este punto. Lo dicen que aquí traen a las muchachas las dirigen de alguna manera aquí las amaran y las llevan de aquí por el callejón, que sale aquí, y que son pagados policías para que después se desechan de los cuerpos. Y queremos preguntarles, ¿por qué estás señalado este lugar en relación a tales cosas? No, no lo sé. Digo aquí es una bossura que lleva 53 años, es una bossura restaurada, es una bossura de sente, digo no sé dónde venga.
Es información. ¿Esté considerada que son mentiras orecisa? Sí, que son mentiras, digo. Ese es la primera vez que me entero de esto. Posteriormente la Sevillana cerró sus puertas y en su lugar quedó un hotel de paso, que se sospecha trabaja bajo la protección de la policía municipal. La escuela de computación ECO cambió de nombre a Encomex e incluso el director fue cambiado por un hombre llamado Juan Capuchino, pero la ruta de la muerte, el perímetro que abarca el centro de Ciudad Juárez, parece ser sólo el comienzo. Escuchamos a Diana Washington Valdez. Hacido en la comunidad de Juárez el secreto o voces, como dicen, y también tenemos testimonios de personas que han estado presentes en algunas de las opuestas orjías, fiestas que se llevaron a cabo por personas prominentes a mujeres que se sintieron en peligro, pero que por ellas no pasó nada, pero conmigo conocemos de las otras situaciones en que si hubo el final de la fiesta fue el asesinato de alguna mujer.
¿Por qué haría alguna persona teniendo tanto poder, teniendo tantos recursos, teniendo tanta posibilidad de conseguir mujeres de otra manera? ¿Por qué matarían? Hasta la fecha la única respuesta que nos han podido dar como una explicación expertos, que es un deporte, es una cacería, es una manera de ejercer el dominio y el poder sobre la mujer. Pero al igual que otros compañeros periodistas, incluyendo defensores de los derechos humanos y a muchos de los familiares de las víctimas, Diana Washington ha sufrido en carne propia el hostigamiento y las amenazas de quienes probablemente sean los autores de estos crímenes. Por ejemplo, la siguiente llamada telefónica fue Hecha, Diana Washington. El rompecabezas formado por las pistas que se iban acumulando con el curso de los años,
señalaba la activa participación de policías judiciales y municipales como los responsables no sólo del hostigamiento y la serie de amenazas a las personas ya mencionadas, sino que también podían ser responsables de tirar los cuerpos de las mujeres más acradas, e incluso podían ser participantes en los asesinatos. Desde un helicóptero, autoridades del gobierno federal mexicano observan con atención una casa ubicada en Ciudad Juárez, pues exactamente debajo del patio fueron descubiertos y exhumados los cuerpos de 12 hombres asesinados. Era el mes de enero del año 2004, según el resultado de las investigaciones iniciadas por la Procuraduría General de la República, fueron presentamente ultimados por extrangulamiento o sofocación por miembros de la policía judicial Chihuahüense. Pero todos los cuerpos presentaban huellas de haber sido torturados. Luego, los periódicos de Dallas Morning Times y el Paso Times revelaron que un informante
del gobierno federal de los Estados Unidos participó en por lo menos uno de los asesinatos. Una mujer que, por obvious razones, pidió que no incluyéramos un hombre en el presente reportaje por temor a las represalias, es pariente de uno de los muertos encontrados en la narcofosa de Ciudad Juárez. Ella declaró lo siguiente, que hay mucha corrupción aquí, ¿sí? Que si están involucrados los mismos de la Judicial, los mismos policías, ¿sí? ¿Qué podemos esperar de los demás? Semanas después, otro escándalo está ya en Ciudad Juárez cuando el su procurador de averiguaciones previas de la Procuraduría Estatal en Ciudad Juárez, el señor Ector Lastra fue detenido a cusado de promover la prostitución de jovencitas, cargo que él negó. Según las acusaciones, Ector Lastra seleccionaba a menores de edad con las mismas fatídicas características de las jovencitas asesinadas, es decir, bonitas y humildes, para obligarlas
a prostituirse con empresarios prominentes de la Ciudad, pero a la fecha no se han revelado los nombres de dichos empresarios, sin embargo, Ector Lastra fue liberado bajo fianza. La tragedia de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez y Chihuahua no ha terminado, pues la historia continúa escribiéndose con los esfuerzos de las familias involucradas y de la sociedad en general para resolver estos crímenes y determinar quiénes han sido los responsables de cometerlos. En nuestro año, mi aspediente de mi hija no tuvo ninguna investigación. Estas son las palabras que pronunció en el año de 2004 en Estados Unidos, una más de las madres que ya nunca volverán a ver a sus hijas. Soledad a Guilar, madre de Cecilia Covarrubias. Cecilia tenía 15 años y era empleada de la industria de las maquiladoras. A ella le encantaba ir a comprar sus apatos a una tienda de la cadena tres hermanos en
la Ciudad Juárez. En 1995, Cecilia Covarrubias desapareció junto con su bebé de apenas 26 días de nacido. Por poco tiempo después fue encontrado su cuerpo que demostraba que la habían asesinado con saña inaudida, como antes y después lo fueron muchas otras mujeres más. A la fecha, la bebé de Cecilia no ha sido encontrada ni tampoco existen indicios de cuál hubiera sido su suerte. La administración a cargo del presidente Vicente Fox se ha designado a una fiscal especial y a una comisionada para esclarecer los asesinatos y proteger a las mujeres en Ciudad Juárez. Sin embargo, a pesar de un sinfín de recomendaciones por parte de los representantes de las
Naciones Unidas, incluyendo las que hicieron la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Amnistía Internacional y la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México, ni una sola autoridad del gobierno mexicano federal, estatal o municipal, ha sufrido las consecuencias de la ineptitud y las omisiones a lo largo de las investigaciones. Tampoco se ha hecho responsable a nadie por la tortura y encarcelamiento en contra de chivos expiatorios. Así mismo no se sabe qué pasaron con reportes policiacos que mencionan a hombres que pueden tener información acerca de los omicidios, cuyos apeídos son Maynes, Martínez, Domínguez, Urbina, Leyva, Fuente y Saragosa entre otros. Tampoco se sabe dónde están policías y expolicias implicados en Crimenes, como en el caso de los dos judiciales federales Carlos Cardenas Cruz y Jorge García Paz, ligados a las desapariciones de Griselda Mares y Silvia Arce, en 1998.
El Instituto Nacional de Mujeres de México estimó que para el año 2002, ya sumaban más de 300 los niños, cuyas madres habían sido salvajemente violadas y asesinadas en Ciudad Juárez. ¿Quién les explicará a estos huérfanos cómo y por qué tuvieron que morir sus madres? Olga Alicia Carrío Pérez, presente, Silvia Elena Morales, presente, Brenda Esmeralda Herrera, presente, Herendina Ponce Hernández, presente, Liliana Olguín Santiago, presente, Paloma Angelica Escobar Le Desma, presente, Olga Lydia Osorio, presente, Diana Yasmín García, presente, Rebecca Contreras, presente, Wendy Rodríguez,
presente, Cecilia Covarrubias, presente, todas son nuestras hijas, todos somos de Juárez, Erika Pérez, Erika Deis y Martínez, Claudia Yves González, Diana Rayas, María Guadalupe Castillo, Marisol González, Vidriana Estrella Martínez, Sandra Luz Castro, todas son nuestras hijas. Usted ha escuchado Caso Juárez, el crimen del siglo, esta es una producción de puntos de vista fronterizos 2000, la cual es única responsable del contenido de este programa. El guión a cargo de Kent Patterson, asistente de producción Mercedes-Megía, asistencia técnica Joe Gardner-Wesley, poema callejera de su lema Rodríguez, extractos del poema
de Olga Alicia Carrillo-Pérez, gracias a la revista la crisis, también gracias al fondo Robinson por su apoyo, yo soy Ana Guillermina Kiros, esto fue puntos de vista fronterizos 2000. línea abierta presentó Caso Juárez, el crimen del siglo, una producción especial del periodista Kent Patterson, en breves instantes línea abierta ofrecerá la mesa redonda Juárez y la impunidad, un programa con lo último de las noticias y el análisis del caso de las asesinadas de Ciudad Juárez. línea abierta es un programa de noticias, ya lo hago el comentario producido por Radio Bilingue en Fresno y San Francisco, California, con auspicio parcial de la Fundación de California and Downing.
Este programa se distribuye a través del servicio de satélite de la radio pública de los Estados Unidos. La Universidad Estatal de California en San Marcos y la Universidad Estatal de California en Fresno hacen posible la transmisión por medio del Internet. La productora de línea abierta Eszara Shakir, el conductor técnico es Jorge Ramirez. Asistentes de producción, Alma Martínez y Patricia Hernández. Samuel Orozco es el productor ejecutivo. Asopiñones que escuchó son exclusivas de sus autores. Escucha usted, satélite, radio Bilingue. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del servicio de la Fundación de California en Fresno y San Marcos y la Universidad Estatal de California
en Fresno y Álvaro. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del servicio de la Fundación de California en Fresno y Álvaro. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del servicio de la Fundación de California en Fresno y Álvaro. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del servicio de
la Fundación de California en Fresno y Álvaro. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del servicio de la Fundación de California en Fresno y Álvaro. En la Universidad Estatal de California en Fresno se distribuye a través del diamonds
y
Series
Línea Abierta
Episode Number
4233
Episode
Juárez Case: The Crime Of The Century
Producing Organization
Radio Bilingue
Contributing Organization
Radio Bilingue (Fresno, California)
AAPB ID
cpb-aacip-3bcc575ac67
If you have more information about this item than what is given here, or if you have concerns about this record, we want to know! Contact us, indicating the AAPB ID (cpb-aacip-3bcc575ac67).
Description
Episode Description
Disclaimer: The following description was created before the live broadcast aired and thus may not accurately reflect the content of the actual broadcast.
Episode Description
In this special documentary, journalist Kent Patterson examined key leads that contributed to bring light into the murders of young women in Ciudad Juárez. During the past decade, 370 women have been murdered and 400 more are missing in this Mexican border city. Featuring original sound and exclusive interviews, the in-depth report also explored links between the Juarez killings and similar slayings in other cities of Mexico. Interviewed guests included victims' family members, former Mexican government officials, human rights activists, and Sergio Gonzalez Rodriguez, author of the book Huesos en El Desierto. This was the premiere of Kent Patterson’s special documentary.
Broadcast Date
2004-06-09
Asset type
Episode
Media type
Sound
Embed Code
Copy and paste this HTML to include AAPB content on your blog or webpage.
Credits
Producing Organization: Radio Bilingue
AAPB Contributor Holdings
Radio Bilingue
Identifier: cpb-aacip-ee71c1a42f1 (Filename)
Format: CD
If you have a copy of this asset and would like us to add it to our catalog, please contact us.
Citations
Chicago: “Línea Abierta; 4233; Juárez Case: The Crime Of The Century,” 2004-06-09, Radio Bilingue, American Archive of Public Broadcasting (GBH and the Library of Congress), Boston, MA and Washington, DC, accessed May 20, 2025, http://americanarchive.org/catalog/cpb-aacip-3bcc575ac67.
MLA: “Línea Abierta; 4233; Juárez Case: The Crime Of The Century.” 2004-06-09. Radio Bilingue, American Archive of Public Broadcasting (GBH and the Library of Congress), Boston, MA and Washington, DC. Web. May 20, 2025. <http://americanarchive.org/catalog/cpb-aacip-3bcc575ac67>.
APA: Línea Abierta; 4233; Juárez Case: The Crime Of The Century. Boston, MA: Radio Bilingue, American Archive of Public Broadcasting (GBH and the Library of Congress), Boston, MA and Washington, DC. Retrieved from http://americanarchive.org/catalog/cpb-aacip-3bcc575ac67